Ocurrió en un edificio de la zona de Puerto Norte, en Rosario, que ya registraba accidentes previos.
Un hombre murió este domingo al caer por el hueco de un ascensor en un edificio ubicado en la zona de Puerto Norte, en Rosario, cuando intentaba rescatar a una mujer que había quedado encerrada en el elevador, según informaron fuentes policiales.
Los voceros policiales informaron que el hecho ocurrió hacia las 16:30 horas, en el edificio de Cándido Carballo al 100, en la exclusiva zona de Puerto Norte, en Rosario. La víctima fue identificada como Germán Cipulli, de 54 años, un prestigioso médico ginecológico de la ciudad.
De acuerdo a las primeras pericias, el hombre habría caído desde el segundo piso al tercer subsuelo del edificio, cuando intentaba ayudar a una mujer que se quedó encerrada en la caja del ascensor.
La policía presume que la víctima abrió la puerta del elevador para rescatar a la mujer, pero por causas que se desconocen, cayó y murió en el acto. Cuando los servicios médicos llegaron al lugar donde había caído Cipulli no quedaba nada por hacer.
A partir del llamado a las autoridades, las fuerzas provinciales de seguridad ordenaron la evacuación de los comercios vecinos a la torre.
En el lugar del accidente trabajaron bomberos zapadores y servicios de urgencias locales, y la investigación quedó a cargo de la fiscal rosarina, Mariel Oliva.
Cipulli estudió en la Universidad Nacional de Rosario (UNR), donde se graduó en 1992. Fue presidente de la Asociación de Mastología local y fue jefe del servicio de esa especialidad en el Hospital Centenario, según informa el diario Vía País.
Además de su labor en el sector de salud pública, fue parte del equipo del Sanatorio Centro y dio clases de ginecología en la UNR, tanto en la cátedra de pregrado como de posgrado. Además formó parte de la Asociación de Obstetricia y Ginecología de Rosario.
Cipulli solía brindar entrevistas a medios locales sobre temas vinculados a su área de especialización, tales como la atención y el tratamiento del cáncer de mama. Tenía dos hijas.
Según denuncian los vecinos de los edificios de Ciudad Ribera —el complejo donde ocurrió la tragedia— los ascensores sufren problemas de manera casi permanente. De acuerdo a los testimonios recogidos por el diario La Capital, son los mismos aparatos puestos durante la obra, que nunca se cambiaron.
Por eso luego de conocerse la tragedia los mismos vecinos recordaban un historial de fallas y accidentes, que no tuvieron respuesta por parte de la administración del complejo.
Ya en ese momento tenían mal funcionamiento y daños en poleas. En 2013, uno de los ascensores se desplomó desde el sexto piso y tres personas resultaron heridas. Eran tres pintores que realizaban tareas de mantenimiento y salvaron sus vidas porque se accionó el freno de emergencia.
Ese mismo año, pero en el mes de abril, una chica de 21 años murió a causa de las múltiples quemaduras que le produjo la explosión de una garrafa y posterior incendio de un departamento del noveno piso del edificio Palco Paraná.
(Fuente: Clarín)
