A medida que la actividad espacial ha aumentado, también lo ha hecho la cantidad de desechos.
A mediados de marzo, se dio a conocer la noticia sobre un fragmento de basura de grandes proporciones procedente de la Estación Espacial Internacional (EEI) que penetró la atmósfera terrestre. Este desecho era una plataforma de carga de tres toneladas, compuesta por nueve baterías, que se enfrentaba a su inminente destrucción al ingresar a la atmósfera terrestre.
Por si fuera poco, desechar equipos usados o innecesarios de esta manera es una práctica común en la Estación Espacial Internacional, ya que los objetos suelen desintegrarse al entrar en contacto con la atmósfera terrestre sin causar daños significativos. Sin embargo, una familia en Naples (Florida, Estados Unidos) experimentó la inusual visita de este fragmento de basura en su hogar.
Según Alejandro Otero, el afectado, el residuo atravesó el techo y los dos pisos de su casa. Además, logró capturar el momento del impacto gracias a una cámara de seguridad doméstica Nest que registró el sonido del accidente a las 21:34, hora peninsular española, el 8 de marzo. Coincidentemente, el Comando Espacial de Estados Unidos también registró el reingreso de un fragmento de desecho desde la EEI a esa misma hora.
En un tuit, Otero señaló que una de estas piezas aterrizó en su casa de Naples, agregando que "casi golpea" a su hijo, y expresó su intención de contactar con la NASA para que confirmaran que el fragmento de basura era el palé de baterías de la EEI.
En respuesta, el diario Ars Technica informó que "los ingenieros del Centro Espacial Kennedy de la NASA analizarán el objeto lo antes posible para determinar su origen" y que "proporcionarán información disponible una vez completado el análisis".
Además, Otero mencionó en el tuit que está a la espera de comunicación por parte de "las autoridades pertinentes" para resolver el costo de los daños a su casa. En este sentido, Ars Technica señaló que "si el objeto es propiedad de la NASA, Otero o su compañía de seguros podrían presentar una reclamación contra el gobierno federal en virtud de la Ley Federal de Reclamaciones por Agravios".
Sin embargo, "si se trata de un objeto espacial creado por el hombre que fue lanzado al espacio por otro país y que causó daños en la Tierra, ese país sería absolutamente responsable ante su propietario por los daños causados".
El origen del problema de la basura espacial
El origen de la basura espacial se remonta a los primeros días de la era espacial, con el lanzamiento de los primeros satélites y cohetes. A medida que la actividad espacial ha aumentado, también lo ha hecho la cantidad de desechos. Las principales fuentes de basura espacial incluyen:
Satélites en desuso: A lo largo de las décadas, muchos satélites han llegado al final de su vida útil y permanecen en órbita como desechos inertes.
Colisiones y explosiones: Los impactos entre objetos en el espacio, así como las explosiones de satélites o cohetes, generan fragmentos que se dispersan y aumentan la cantidad de basura.
Fragmentación controlada: En algunos casos, se ha realizado la fragmentación controlada de satélites en desuso para evitar riesgos de colisión. Sin embargo, esto también contribuye a la proliferación de desechos.
Riesgos de la basura espacial
La basura espacial presenta una serie de impactos y riesgos significativos:
Riesgo de colisiones: Los desechos orbitales se mueven a velocidades extremadamente altas, lo que los convierte en proyectiles peligrosos para naves espaciales operativas y satélites en funcionamiento. Las colisiones pueden causar daños graves e incluso la destrucción de equipos espaciales.
Contaminación orbital: A medida que la cantidad de basura espacial aumenta, se vuelve más difícil para las agencias espaciales y las empresas privadas lanzar nuevas misiones sin riesgo de colisión. Esto limita el acceso al espacio y la expansión de actividades comerciales y científicas.
Impacto en la exploración espacial: La basura espacial plantea un desafío significativo para la exploración humana y robótica del espacio. Las misiones tripuladas, como la Estación Espacial Internacional, deben maniobrar para evitar colisiones con desechos, lo que aumenta la complejidad y el costo de las operaciones.
Soluciones y Mitigación
Abordar el problema de la basura espacial requiere una acción coordinada a nivel internacional y la implementación de diversas estrategias:
Retirada activa: Se están desarrollando tecnologías para la eliminación activa de desechos, que van desde sistemas de captura hasta técnicas de remoción utilizando láseres o redes.
Normativas y regulaciones: Es fundamental establecer normativas y regulaciones internacionales para reducir la generación de basura espacial y garantizar la sostenibilidad a largo plazo del entorno orbital.
Diseño de satélites sostenible: Los fabricantes de satélites y cohetes deben adoptar prácticas de diseño que minimicen la generación de desechos y faciliten la retirada al final de la vida útil del satélite.
Vigilancia y seguimiento: Se requiere una vigilancia continua del entorno orbital para monitorear la cantidad y la ubicación de la basura espacial, permitiendo la predicción de posibles colisiones y la planificación de maniobras de evasión.