La compañía incrementa la cantidad de residuos reciclados, apostando así por el consumo responsable de recursos y la economía circular...
MAPFRE se unió, 17 de mayo, al Día Mundial del Reciclaje, una fecha en la que pone de manifiesto su compromiso con la sostenibilidad y la economía circular, uno de los principales retos globales.
El año pasado generó un total de 3.318 toneladas de residuos en todo el Grupo, de las cuales, 3.071, un 93% del total, se sometieron a procesos de valorización, es decir de recuperación, reciclado y producción de energía.
Entre sus principales hitos en 2022, destaca haber evitado el consumo de 191 toneladas de papel gracias a la firma electrónica biométrica, una medida con la que ha evitado la emisión de 166,75 TmCO2eq en España y Portugal. Destaca, además, por haber reutilizado el 77% del total de residuos de equipos informáticos en España, haber donado 24.750 kilos de equipos informáticos en el Grupo y haber reciclado 289 toneladas de residuos en varios edificios de Madrid, lo que representa cerca del 100% de los residuos que genera la entidad en su sede corporativa, en España.
Este último logro ha sido posible gracias al proyecto ‘Residuo Cero’, un certificado que ha obtenido por segundo año consecutivo y que concede AENOR a las entidades que clasifican los residuos que generan para que puedan reutilizarse o reciclarse y no acaben en un vertedero. La compañía ha implantado este modelo de gestión por primera vez en México, donde la fracción orgánica se composta y genera una materia prima totalmente aprovechable para uso agrícola, y tiene previsto expandirlo en Brasil y Puerto Rico antes de 2024.
MAPFRE aspira a convertirse en una empresa de referencia en economía circular, que,según la entidad, permite generar oportunidades de negocio al mismo tiempo que se protege el medio ambiente y la sociedad. El Grupo promueve el consumo responsable de recursos, así como la reducción, reutilización y el reciclaje de desechos, disminuyendo así el depósito en vertedero. Realiza, además, acciones para combatir el desperdicio alimentario y contrata gestores con modelos de negocio que vayan en consonancia con los principios de circularidad. Destaca, además, el hecho de haber eliminado todas las botellas y vasos de plástico de un solo uso, gracias al proyecto ‘MAPFRE Sin Plásticos’.
Miles de piezas de coches recicladas
La compañía ha tratado, además, un total de 1.847 vehículos fuera de uso, de los que ha recuperado 54.485 piezas para su reutilización en diferentes mercados, gracias a CESVIMAP, Centro de Experimentación y Seguridad Vial MAPFRE. Este centro tecnológico global está especializado en la reparación y reciclado de vehículos, entre otros servicios, y es una referencia en cómo deshacerse de los vehículos de una manera sostenible, alargando la vida de las piezas, facilitando la reutilización de materias primas, como el plástico y el cristal, y reduciendo el consumo de energía.
El Plan de Huella Ambiental 2030 de MAPFRE establece un objetivo ambicioso de valorización para los próximos años: aprovechar el 83% de los residuos que genere el Grupo en los países donde opera para 2024, y del 90%, para 2030.