Un hombre de 66 años está postrado hace cuatro meses tras realizarse una resonancia magnética por un dolor en la pierna derecha...
“Los médicos sabían que mi papá tenía el aparato ortopédico de metal en la pierna, él le avisó a la técnica. Lo hicieron subir igual a la camilla y lo succionó el resonador. Le quedó la pierna pegada y los médicos empezaron a forcejear para despegarlo”, es el relato que Lorena Nittoli dio por Ahora Vengo, en una entrevista realizada por Luis Mino.
La mujer es hija de un hombre de 66 años que está en cama hace cuatro meses tras ese episodio, y la familia denunció mala praxis por parte de los profesionales de un centro de diagnostico por imágenes de Santa Fe, ubicado en calle Junín.
La denunciante sostuvo que el 5 de enero a las 14:30, su padre ingresó con un turno al centro de diagnóstico, en perfecto estado de salud, caminando, para hacerse una resonancia de columna ya que sentía un temblor en la pierna derecha; en este punto, Nittoli aclaró que “él usa un aparato ortopédico de metal en la pierna izquierda a consecuencia de una poliomielitis. Cuando lo atienden le dicen que se acerque a la sala donde está el resonador, donde no se puede ingresar con ningún elemento metálico; el rellena de puño y letra un consentimiento informado donde da cuenta de eso, y aclara que se lo tienen que quitar”.
La mujer agregó que esta circunstancia también fue advertida a la técnica, quien “hace caso omiso, lo hace subir a la camilla y le dice que le va a sacar el aparato. Cuando se sube a la camilla es succionado por el resonador, la pierna donde tiene el aparato queda pegada al equipo, los médicos forcejean, no lo podían despegar…”, relató. Cabe resaltar que el aparato ortopédico que usa el padre de Lorena es externo y completamente visible, por lo que, según la denunciante, los médicos no pueden no haberlo visto antes de hacer ingresar a su padre al resonador.
Como consecuencia de ese episodio, el hombre sufrió una fractura triple de fémur, que se sumó a la dolencia que ya tenía en la otra pierna. “Y lo peor de todo es que luego de eso lo ingresaron igual al resonador, con la pierna quebrada, con el incidente violento que había padecido y sin aplicarle anestesia para el dolor, le hicieron la resonancia igual”, sostuvo la mujer.
La denunciante agregó que el equipo de profesionales que asistió a su padre “siempre hablaron de accidente, de que fue culpa del paciente, no nos querían dar la historia clínica... tuve que intimar a través de una carta formal para que nos la den y nos dieron fotocopias aisladas, sin orden, que no estaban certificadas por ningún médico”, cuestionó.
Nittoli explicó que el mismo día del hecho se radicó una denuncia penal en la Comisaría 1ª, y que ya tomó intervención en la causa la fiscal Rosana Marcolín. La mujer precisó que la denuncia es contra el director del lugar, el equipo médico de resonancia magnética compuesto por cuatro médicos, y una licenciada en bioimágenes.
(Fuente: Aire de Santa Fe)