El propietario de un automóvil Chevrolet blanco, que había llegado muy temprano a realizar la Revisión Técnica Obligatoria de su vehículo, jamás imaginó que además de pagar el servicio, iba a terminar destrozando accidentalmente las oficinas de la empresa.
El propietario de un automóvil Chevrolet blanco, que había llegado muy temprano a realizar la Revisión Técnica Obligatoria de su vehículo en Corrientes, jamás imaginó que además de pagar el servicio, iba a terminar destrozando accidentalmente las oficinas de la empresa.
El insólito incidente, que de milagro no provocó heridos graves, ocurrió este lunes a las 7:16, cuando el vehículo, de los primeros en llegar, se perfiló en la zona de pruebas.
Estaba a punto de avanzar por los rodillos, cuando de repente el Chevrolet salió disparado hacia su costado derecho, justo rumbo a las oficinas donde se encuentran los administrativos. Destrozó todo el ventanal. Uno de los empleados alcanzó a correrse justo.
No hubo heridos y si bien seguro no pasó la prueba, la factura por los daños de seguro será cuantiosa.
(Fuente: Diario Época)