La falla no puede solucionarse en los habituales recall por falta de piezas. La marca alemana lanzó una advertencia global. El caso es inédito.
La marca alemana de autos de lujo Mercedes Benz lanzó en las últimas horas una alerta global frente al riesgo de incendio que tienen varios de sus modelos por una falla en la bomba de agua.
La advertencia de la marca alemana incluye a todos los mercados donde tiene presencia en el mundo, ya que comprende a unas 800.000 unidades de diez modelos diferentes.
La posibilidad de un recall masivo, como es usual en distintas marcas, es inviable en el corto plazo ya que Mercedes no cuenta en lo inmediato con todas las piezas necesarias para reemplazar en cada uno de los vehículos involucrados.
El número de autos afectados es impactante porque incluye a todos los que tengan motores turbodiésel (muy usuales en la marca alemana) y que fueron fabricados entre enero de 2017 y octubre de 2021, es decir en casi 5 años.
Los modelos afectados por la falla son Clase C (W205), CLS (C257), Clase E (W213d), Clase E Coupé/Cabriolet, Clase G (W463), Clase GLC (C/X253), Clase GLE/GLS (W/X167) y la berlina Clase S (W222 y W223).
Sin una solución inmediata para atender a todos los autos que deberían ser llamados a revisión, desde la marca llegaron a sugerir que se minimice el uso del vehículo.
La información fue primero publicada por el diario alemán Bild y luego confirmada por la propia compañía. Una vez que se conoció el caso, Mercedes Benz emitió un comunicado en el que admite la falla aunque evita dar precisiones sobre el número de vehículos involucrados, según indicó Motor1 España.
Respecto al desperfecto en sí, se sabe que afecta a la bomba de agua, que es un elemento vital en el funcionamiento de un motor de combustión puesto que se encarga de mantener la circulación del líquido refrigerante por todo el circuito, para de ese modo evitar recalentamientos que dañen en forma parcial o total a los componentes más sensibles.
En este caso, la marca asume que este elemento puede estar defectuoso en algunos casos, lo que puede provocar fugas y aumentar considerablemente el riesgo de incendio.
Un vocero de la marca citado por Motor1 de España admitió que “en este caso, la entrada de refrigerante en el sistema puede dañar varios componentes”. Y especifica: “Si las válvulas de los interruptores eléctricos entran en contacto con el refrigerante, la temperatura de las respectivas piezas puede, en casos aislados, aumentar con el tiempo debido a una reacción electroquímica”.
En ese sentido, la automotriz planifica el llamado a revisión de cada uno de esos modelos pero asume que no puede hacerlo de inmediato ya que no tiene el total de autopartes necesario para enmendar la falla en todos los vehículos sospechados. Dijo, en tal sentido, que sus proveedores autopartistas vieron afectada su capacidad de producción en medio de la emergencia sanitaria. A esto se le suma la pesadilla logística que significa enviar todos los repuestos necesarios (unos 800.000) a prácticamente todos los rincones del planeta.
(Fuente: EFE)