Federación Patronal: Innovación y Bienestar en la gestión de riesgos laborales

Por Diego Sciatore, Jefe de División - Federación Patronal ART.


Por Diego Sciatore, Jefe de División - Federación Patronal ART.



En un entorno laboral cada vez más desafiante, las empresas se enfrentan a una presión constante por cumplir con las normativas de seguridad, adaptarse a nuevas tecnologías y mejorar el bienestar de sus empleados. Pero, ¿cómo se logra realmente un equilibrio entre la prevención de riesgos y la creación de un ambiente que favorezca la salud y productividad? Desde mi rol como Jefe de División en el Área de Riesgos de Trabajo de Federación Patronal ART, he descubierto que la clave no está solo en cumplir con las leyes, sino en integrar la prevención de forma estratégica y proactiva en la cultura laboral. La gestión de riesgos laborales no debe limitarse a cumplir con la normativa. El verdadero desafío radica en crear una cultura de prevención sólida que trascienda la obligación legal. Las empresas que piensan más allá de la normativa y se enfocan en el bienestar de sus empleados logran no solo mitigar riesgos, sino también potenciar el rendimiento y la productividad de sus equipos. Esto implica integrar tecnologías, estrategias innovadoras y, por supuesto, el bienestar integral de los trabajadores.

Uno de los principales desafíos en el área de riesgos laborales es la constante adaptación a nuevas normativas. Las leyes sobre seguridad y salud laboral están en constante evolución, lo que obliga a las empresas a mantenerse al día con los cambios. Sin embargo, el cumplimiento normativo no es suficiente para posicionarse como líder en el mercado. Las organizaciones deben dar un paso más allá y aplicar estrategias que no solo respondan a lo exigido, sino que mejoren el entorno laboral de manera continua y efectiva.

Una de las herramientas clave que ha demostrado ser fundamental en este proceso es el uso de nuevas tecnologías y la automatización de procesos. Estas herramientas permiten seleccionar los servicios más adecuados, mejorar la eficiencia en la gestión de riesgos y optimizar las operaciones de manera precisa.

En lo personal, uno de los aprendizajes más importantes ha sido el impacto del Programa Bienestar Laboral en mi día a día. Gracias a la implementación de pausas activas, pude mejorar considerablemente mi bienestar físico, reduciendo contracturas cervicales y lumbares que padecía por años debido a una postura repetitiva en el trabajo. Esta práctica no solo alivió mis dolencias, sino que también incrementó mi concentración y rendimiento, tanto en el trabajo como en la vida personal. Esto ejemplifica la importancia de la prevención que puede generar resultados profundos y sostenibles en el tiempo.

La salud y el bienestar de los empleados no son solo una responsabilidad moral de las empresas, sino una estrategia esencial para garantizar el éxito a largo plazo. Crear un entorno laboral saludable fomenta la productividad, reduce el ausentismo y mejora la moral del equipo. Las organizaciones que priorizan la prevención y el bienestar están invirtiendo en su activo más valioso: sus empleados. Al implementar prácticas que cuiden de su salud física y emocional, las empresas no solo cumplen con su deber, sino que se aseguran un futuro más próspero y exitoso.