Un colectivero de 45 años se acercó a la comisaría de su barrio, en el sur del Gran Buenos Aires. Sin embargo, se contradijo en sus dichos, y la gente del vecindario lo desmintieron.
Un colectivero de 45 años denunció que le robaron su auto particular, pero las autoridades descubrieron que en realidad fundió el motor, y quería engañar a la empresa aseguradora para cobrar el dinero.
Fuentes policiales informaron a cronica.com.ar que el acusado se presentó el pasado viernes en una Comisaría de Quilmes, donde contó que había dejado estacionado su vehículo, para luego ir a su trabajo, como chofer de a línea de colectivos 257.
Según declaró, se trataba de un Citroën Berlingo de color celeste, sustraído de la vía pública, sobre Unamuno y Rodolfo López. Sin embargo, comenzó a contradecirse en sus dichos al ser consultado respecto al hecho por las autoridades.
Los funcionarios policiales hicieron un relevamiento en el lugar del supuesto hurto, donde constataron a través de testimonios de los vecinos que no hubo ningún episodio delictivo en esa durante el horario descrito por el denunciante.
Con esos datos, los uniformados volvieron a entrevistarse con el chofer de colectivo, que ya no pudo sostener la mentira, y confesó la verdad, al no tener otra alternativa.
De la boca del sospechoso, los agentes escucharon decir que en realidad había tratado de engañar a las autoridades para cobrar el dinero del seguro.
(Fuente: Cronica.com.ar)